Consígueme un poco de dinero más

Esta mañana al abrir menéame veo la siguiente noticia:

Iberdrola avisa de que cortará la luz de los institutos que no pague 

La cosa se puede poner chunga. En el claustro de inicio de curso la directora dijo que no les habían ingresado la dotación correspondiente todavía.

Pero añadamos algo bueno. He cobrado el primer trienio con los atrasos.

Contestación a "yo trabajaré 20 h"

Vaya, veo que mucha gente no ha entendido la ironía con la que escribía sobre el tema. Y eso que en Menéame pone [humor]. Pero bueno... Quien se quiera tomar en serio todo lo que he escrito es libre de hacerlo.

Está claro que el problema no son dos horas más, pero es lo más visible. El gran problema es que miles de profesores interinos van a ir al paro y que junto a esto, se incrementa la ratio en las clases. Como consecuencia directa las clases van a costar un poco más porque adiós a los desdobles, refuerzos, etc... Veamos esta noticia con una falacia que se cae sola de nuestra "amiga" Espe:
Por último, la presidenta madrileña ha "garantizado a los madrileños no sólo que se va a cumplir la ley (educativa) sino que la calidad de la enseñanza no sólo no va a sufrir sino que va a mejorar" ya que clases antes dadas por interinos "las van a impartir profesores titulares" que han obtenido su plaza por oposición. "Mejora la calidad de la enseñanza", ha concluido.
Increíble.

Bien, por supuesto que trabajaré todas mis horas y corregiré como está mandado (no voy a hacer exámenes tipo test porque soy de la especialidad de matemáticas y no creo que muestre bien las capacidades de los alumnos). Sin embargo el post anterior ha servido para que salga toda esa masa de anónimos y trolls que parecen que tienen algo personal contra los docentes. Además de tragarse todas las mentiras mediáticas quieren que se eliminen  los "privilegios" para que todos estemos tan mal como ellos. Yo propongo lo contrario: luchad porque las condiciones laborales de todos mejoren. Hace unas semanas se aprobó poder encadenar contratos laborales temporales. Parece ser una medida temporal pero ya sabemos que lo que se instaura no es tan fácil de eliminar. No me ha parecido que haya habido mucha protesta. Aún habrá quien diga que es bueno porque habrá más trabajo ya que el empleador será más propenso a proponer este contrato que uno indefinido. Pan para hoy y hambre para mañana.

Cerca de mi casa hay un instituto (no el mío, que está a unos cuantos kilómetros) y ayer a las 23:30 había profesores dentro. Salieron entonces y me crucé con ellos. Son parte del equipo directivo y están preparando los horarios de los profesores. Eso que en otros muchos centros de la CV se hace en julio. Un asunto nada desdeñable del que hablaré en un futuro. Me dijeron que no les dio tiempo a meter todos los datos al ordenador, así que hoy sábado están allí.

Esto es parte de algo mayor: el desmantelamiento del estado del bienestar. Cuando haya pasado la tormenta en la educación veremos la de la sanidad (de momento, chubascos localizados en la zona de Catalunya) y luego se (mal)venderán edificios y empresas públicas (si quedan). Todo por que es una situación especial de crisis y en tiempos normales no lo haríamos. Pero lo haremos y no habrá vuelta atrás. Por eso, protege tu estado de bienestar (lo que queda de él) y no te metas el dedo en tu ojo.

Yo sí quiero trabajar 20 horas

Ya está bien de tanta queja. Yo sí que quiero trabajar 20 horas. Y eso que en mi comunidad todavía no se ha implantado esta medida. Tiempo al tiempo.

Daré mis 18 horas lectivas y luego dos guardias más. No habrá más remedio que redactar los exámenes en uno de los cinco ordenadores que hay en la sala de profesores (los del departamento están estropeados y no se encienden siquiera). Es fácil, haré turnos hasta que me toque, pero eso sí, en mis horas complementarias. Luego copiaré el archivo en un USB y tendré que imprimirlo en uno de los dos ordenadores que hay conectados a la impresora. Puede ser que al escribirlo en el entorno Lliurex (una distribución de Linux para la Comunidad Valenciana) las fórmulas se vean mal porque los ordenadores que pueden imprimir van con Windows XP; los de Lliurex no tienen drivers para controlar la impresora. Pero eso es el día a día. Acortaremos las reuniones de departamentos y las de tutores para que nos dé tiempo a los 60 profesores que somos.

Tampoco voy a hacer la reunión con los padres. Sí, soy tutor de un 3º de la ESO pero los padres tendrán que venir en la correspondiente hora de atención a padres. Este curso no voy a pedir las libretas porque no me daría tiempo a corregirlas en las horas complementarias y no es cuestión de llevarse el trabajo a casa, que son horas extras y no las pagan.

Para corregir los exámenes voy a usar un método tan antiguo como eficaz (por lo rápido):
1. Se hace un círculo de tiza en el suelo (1,5 m de radio es suficiente)
2. Se lanzan los exámenes al aire.
3. Los que caen dentro aprueban, obteniendo más nota cuanto más cerca del centro se encuentren; los que caigan fuera, suspensos.
Esto garantiza que las notas siguen una gaussiana, aunque no he calculado cuál es la media y la desviación típica (depende fuertemente de la superficie del recinto donde se lancen los exámenes).

Si tengo que llamar a algún padre lo haré cuando haya un rato. Si fuera ortodoxo lo haría sólo en la hora de padres o la segunda hora de tutoría, pero yo soy muy flexible. Incluso aceptaría hacerlo algún recreo. Si toca el timbre de la clase siguiente o el de acabar la jornada colgaré inmediatamente el aparato y a otra cosa. En la próxima hora de padres (a la semana siguiente) continuaré la conversación. Se acabó también hacer actividades extraescolares (son horas extras que no se cobran aunque uno recibe créditos (i. e. horas canjeables como cursos y puntos para los concursos de traslados u oposiciones)). A jugar al parque.

Tampoco creo que me dé tiempo a prepararme las clases. Puede que si en alguna guardia no tengo que sustituir a algún compañero me lea por encima lo que voy a contarles. Total, nadie va a notar la diferencia. Lo siento por mis alumnos de bachillerato de ciencias pero tengo una gran capacidad para la improvisación, y si no es así, ya la iré puliendo este curso.

Tampoco me da tiempo a realizar ningún curso de formación docente. Bueno, miento, puedo hacer uno telemático. Quizás tenga suerte y justo en alguna hora complementaria de atención al centro puedo acceder a uno de esos cinco ordenadores con conexión a internet. Será duro convencer a los profesores que necesitan redactar su examen, pero ya me inventaré algo.

Esto sería lo fijo, pero puede ser que, además, me nombren instructor de un expediente, como ya me ha pasado alguna vez. Recordemos que me tendría que entrevistar con el alumno en cuestión y sus padres y luego decidir la medida disciplinaria correspondiente. A esto sí que le daría prioridad y si hay que un examen por trimestre para que me dé tiempo, pues se hace, se corrige con el método ya nombrado y listo.

Ah, claro, cómo olvidarlo. Las evaluaciones. No puedo ir a esas sesiones fuera del horario lectivo, ¡yo tengo vida! Ya las haremos durante el recreo en la cafetería (así podríamos coincidir todos los profesores del curso). Puede que quede un poco ajustado, ante la duda que la directora elija la nota (ya lo hace).

Quiero trabajar 20 horas pero se me hace cuesta arriba. En fin, lo que sea para contribuir al progreso de la educación y del país.